Todas las declaraciones de Guardiola antes de los partidos están centradas en la inmediatez, dejando claro que para ser campeones no hay que mirar más allá del próximo partido, ya que piensa que en el mundo del fútbol nunca sabes donde vas a estar dentro de un mes.
Pero si hacemos caso a sus hechos, lo cierto es que Guardiola lleva todo el año mirando al largo plazo, intentando que sus hombres estén al 100% en los meses donde se juega la temporada, esto es, de marzo a mayo. El partido contra el Sporting de Portugal es el primer envite en el que de verdad está en juego llegar a Marzo en las mejores condiciones posibles.
La derrota en Lisboa dejaría al Barça a merced de un milagro para ser primero de grupo, obligándole a jugar la vuelta fuera de casa, posiblemente con un rival de entidad. Si tenemos en cuenta que en los últimos 5 años el Barça no ha pasado ninguna eliminatoria con el factor cancha en contra, la importancia del encuentro es máxima.
Para conseguir el mejor resultado posible en el Jose Alvalade, Guardiola ha dejado en casa a Puyol y Toure. Podrá decir lo que quiera Pep, pero la única verdad es que estas bajas están pensadas para afrontar de la mejor forma posible los siguientes 4 partidos de Liga.
La baja de Toure es comprensible. El S.Portugal es un equipo que juega alegra, que deja espacios y que permite tocas en el centro del campo. Un escenario diferente al que espera al Barça en Sevilla, donde la fuerza y poderío en el juego aéreo del marfileño se nos antoja decisivo.
Menos entendible es la baja de Puyol. Solo desde la perspectiva del descanso se puede comprender. La velocidad es una de las armas de los lisboetas. Sin Puyol y Abidal, no hay un defensa en la plantilla que puede jugar con espacios detrás de sus espaldas. A lo mejor, estamos ante la prueba de fuego de Cáceres. De ser así, nos parecería un riesgo el no haberlo hecho jugar antes partidos de parecido nivel.
Pero de todas las dudas que crea Guardiola con sus rotaciones, la más mediática es la presencia o no de Messi en el 11 inicial. Debido al oscurantismo que rodea todo lo médico en Can Barça, se desconoce el alcance real de las molestias de Messi, haciendo creer a algunos que si no son unas molestias “inventadas” para que Messi afronte con 2 semanas de preparación personal los 4 partidos durísimos que se avecinan ahora.
Sean o no ciertas estas molestias, si Guardiola considera que la clave es la Liga, debería actuar en consecuencia y dejar a Messi en el banco. Reixach siempre alardea que él cuando alguien está tocado lo saca de entrada para que sentencie rápido y luego vaya al banco con los deberes hechos.
Sin embargo, todo el mundo sabe lo difícil que es sentenciar en el fútbol en 45 minutos. Si no está para jugar más, mejor que juegue los últimos para poder decidir en caso de ser necesario y si no se requiere su presencia, contemple la victoria de su equipo al lado de Guardiola.
De darse la victoria del Barça mañana, habrá conseguido 7 días sin partido “trascendente” en la semana previa al choque contra el Madrid. La última jornada de la liguilla de la Champions se disputa 3 días antes del clásico por excelencia del fútbol español.
En esa situación idílica ya se encuentra el Madrid, que después de los resultados de la quinta jornada de la Liguilla se ha asegurado su pase a octavos, siendo muy difícil ser primero, ya que la Juve debería perder contra el BATE en su campo. Que el Barça jugase un partido a cara de perro horas antes es darle ventaja al rival.
Para que eso no pase se debe ganar hoy. El empate, obligaría a vencer al Shaktar en casa. Aunque parezca mentira, muchas de las opciones de la Liga pasan por el partido en el José Alvalade. Seguro que Guardiola es consciente y actuará en función de esto.
No sabéis con que nervios esperamos el partido!!!
The Digital Garden
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