La paciencia acostumbra a tener premio. El Barça la tuvo a grandes dosis durante todo el partido y obtuvo su recompensa. Fueron 3 puntos y mucho más. Se ganó en confianza, en variantes tácticas y en autoridad, ya que supo sobreponerse a todas las adversidades que el Málaga le fue planteando durante todo el partido. Al final, el 2 a 1 final hace más que justicia a lo visto en el terreno de juego.
Salió el Barça con una sorpresa táctica no vista hasta la fecha. Cambio el dibujo táctico i - BuGuardiola, aunque como dijo en la previa eso no significa cambio de estilo. Salió con doble pivote( Xavi y Busquets), con una línea de 3 por delante, en la que Pedro e Iniesta eran las bandas y Messi el media punta. Delante solo Ibra, haciendo de hombre boya.
Seguramente fue por los errores posicionales vistos en los últimos partidos, en los que el equipo de Pep quedaba desprotegido después de perdida. Le salió bien, pues el Málaga solo creó una ocasión de peligro en todo el partido, sin contar una falta lanzada por duda en los primos instantes del partido.
Desde entonces el Barça se hizo amo y señor del partido. Cogió la pelota y no la soltó. La movió rápido, con inteligencia y sentido. Sin prisa, pero sin pausa. Las ocasiones fueron llegando una a una. A medida que el cronómetro se acercaba al final del primer tiempo, el Málaga estaba más y más grogui.
El balón no entró porque los defensas malacitanos estaban especialmente inspirados, cortando cualquier acción de peligro y llegando donde no llegaba el portero Munua. El 0 a 0 no hacía justicia con lo visto en el terreno de juego, ya que el Barça había recuperado el aroma de buen juego que parecía que solo era un recuerdo en la mente de los barcelonistas.
Ayudó mucho Alves. Con él el Barça cuenta con un centrocampista más, con un hombre que sube siempre y da una opción de pase a gente como Xavi, y distrae a los defensas rivales, que ven como un jugador de segunda línea sorprende , permitiendo más espacios para los hombres que juegan en punta.
En la reanudación nada cambió. De nuevo fue de menos a más el Barça y el gol se mascaba. Tardó en llegar. Fue Pedro. De nuevo cumpliendo su máxima. Cuando menos aparece durante un encuentro, siempre acaba marcando. Cuando mejor juega, más parece olvidarse del gol. Hoy , un chute desde fuera del área, haciendo la diagonal de dentro a fuera, puso al Barça en ventaja, haciendo creer a todo el mundo que el liderato estaba a salvo.
Nada más lejos de la realidad. Poco tiempo después, un contraataque precioso del Málaga, termino con un mano a mano de Valdo con Valdés, que definió perfectamente poniendo el miedo en cuerpo a todo el estadio. Antes del gol malagueño, el Barça había tenido tiempo para marrar varias ocasiones y mandar un balón al palo.
Pero a los únicos que no les entró el pánico fue a los jugadores. En la siguiente jugada al gol visitante, Messi chutó sin colocación un disparó en una posición franca. Acto seguido, una jugada de manual, de todo el equipo y que Messi empujaba, desde la posición de 9, a la red, para ahora sí sentenciar el encuentro.
El gol fue espectacular. Comenzó en la izquierda y terminó en la derecha. La tocaron todos los hombres de ataque blaugranas. Pero especialmente meritorio fue el pase de Xavi a Alves, en medio de toda la defensa rival, así como la carrera de 40 metros de éste, en el minuto 85 de partido, justo después de salir de una lesión.
Un justo final para el que fue uno de los mejores partidos del Barça del año. Buen juego, buena actitud y variantes tácticas que ponen de manifiesto todo lo que dijo Guardiola en la previa. Una victoria sufrida, pero mucho más reconfortante que las últimas goleadas del equipo que habían dejado más bien frió a la afición y al entorno.
No sabéis que ganas teníamos de ganar así!!!
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