Si uno se para a pensar durante 3 minutos sobre la situación que se vive en la Liga de Fútbol Profesional lo más normal es que deje de seguir la competición, se dedique a otras cosas y pase absolutamente del devenir de la competición. Esta sería la reacción más sensata y producto de una reflexión serena.
Lamentablemente, hay en juego sentimientos y eso hace que sucede lo que suceda con la próxima jornada de Liga, nosotros los aficionados, los únicos que sostienen este invento y que si algún día decidimos dejar de consumir verían los futbolistas lo que es pasar penurias, estaremos sufriendo y padeciendo por el resultado de nuestros equipos.
Resulta, siendo suaves, ridículo que una situación sabida desde el mes de julio se tenga que resolver 3 días antes de jugarse los partidos. Pero es mucho más grave aún que una de las opciones que se plantee es el que se dispute la última jornada de Liga 3 semanas después de disputarse la penúltima.
Solo un necio, un incompetente, una persona sin capacidad de raciocinio se plantearía una cosa similar. Y lo peor del caso es que es la opción que más visos tiene de llevarse a la práctica si nadie pone remedio. Que el asunto ha llegado a la Audiencia Nacional, como si no hubiese temas más importantes que tratar…
Sin querer ser demagogos, resulta que los futbolistas ganan más dinero del que generan, resulta que son unos privilegiados que viven en una situación ideal muy por encima que la gran mayoría de personas, resulta que dicen quejarse porque unos cuantos( es igual si pocos o muchos) no cobran al final mes, o sorpresa, como gran parte de este país.
Y la queja radica en no jugar el día dos de enero, ya que su convenio colectivo así lo indica. Y aquí es cuando a cualquier futbolista con dos dedos de frente se els caería la cara de vergüenza. Porque, hasta donde alcanza nuestro conocimiento, los futbolistas trabajan para el público, por mucho que quien les pague es otro.
Pero no, el gremio de futbolistas pretende cobrar como nadie y en cambio, pretende tener los mismos derechos y beneficios que el común mortal de trabajadores. Se olvidan que el gremio de restauración trabaja y de qué manera, el día 1. ¿Se imaginan a los camareros quejándose? Pues eso pasa con los futbolistas.
Ya consiguieron no jugar en navidad, cuando seguramente los clubs( aquellos que les pagan por encima de lo que generan) recaudarían mucho más de hacerlo en épocas festivas. Luego consiguieron no jugar el día 1, luego tener una semana de fiesta en navidad. Todo encaminado a ser trabajadores normales.
No lo son. O sí, pero quien es futbolista debe saber lo bueno que tiene la profesión y lo malo. Aquel que no quiere trabajar los fines de semana, no se meterá en el sector de la restauración. Si los futbolistas no quieren trabajar en fechas navideñas, que no sean futbolistas. Pero no se puede pretender disfrutar solo de las ventajas y no tener ningún inconveniente.
Y el cuento de que hay muchos que no cobran tanto, o que no se les paga, no sirve. El sueldo medio en segunda división B, al menos en los club que son más cercanos a nosotros( los de Catalunya) tieneb sueldos que son más altos que la media( no mucho más eso sí). Lo que ya no es problema de los demás el hecho de que no se trabajen un futuro fuera del fútbol.
El cuento de que la vida de un deportista es corta es la mayor milonga que le pueden decir a uno. Porque nadie impide a un futbolista de segunda B estudiar para labrarse un futuro fuera del deporte. Y de ser tan corta, ¿Por qué no se sacrifican unos años en no pasar las navidades con sus familias? ¿Que es demagogia lo dicho? No más que los argumentos de los futbolistas.
No sabéis que poco entendemos a los futbolistas!!!
The Digital Garden
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