Después de revisionar el partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions, la sensación que nos queda es ambigua. Globalmente, el equipo hizo todo lo que se le puede exigir. Esto es, presión tras pérdida, rápida circulación de balón, movimientos sin balón e intentar acabar todas las jugadas para evitar contras. Sin embargo, algunos detalles convendría corregirlos de cara al encuentro contra el Realísimo.
El primero es que el equipo estaba partido, dejando demasiado solos a Xavi y Busquets. Cuando se perdía el Balón, Keita estaba demasiado lejos de ellos y solo la falta de acierto en los pases privó de más ocasiones del Arsenal. Un fuera de juego señalado cuando no lo era privo a los ingleses plantarse mano a mano con Valdés, justo después del primer gol local.
Otra de las cosas a intentar evitar es los pases horizontales en defensa. Cierto es que el Barça siempre arriesga en la salida de balón, pero lo de ayer fue demasiado. Milito conducía demasiado, Maxwell y Alves muchas veces dejaron de buscar la verticalidad para jugar con los centrales, poniendo en riesgo la posesión con cierta frecuencia, muchas veces de manera innecesaria.
Son detalles a pulir, simplemente eso. Quizá con la brutalidad que hizo Messi pueden quedar en el olvido para la mayoría, pero no para Pep. Seguro. No será lo mismo tener al danés que al Pipita, a Walcott que a C.Ronaldo, o a Diabby que a Alonso. Con ellos delante, cualquier error puede ser mortal. Ayer no lo fue, pero faltó poco. Y no siempre estará Messi en plan celestial, ¿o sí?
Al prinicipio de la competición, habían 4 grandes aspirantes. Solo uno de ellos ha llegado a las semifinales. En esos momentos, nadie hubiese apostado a que no habría ningún equipo inglés en la penúltima ronda. Hasta este año, ningún entrenador había disputado con 3 equipos diferentes unas semis. Mou y Van Gaal lo han conseguido. Robben y Sneijder no habían jugado unas semis en los últimos 3 años, fueron desechados en su club y han sido los artífices de la clasificación en sus nuevos destinos.
El Lyon y el Bayern acompañarán a Inter y Barça en la disputa por un hueco en la final de Chamartín. Nadie podrá negar los méritos de los 4 conjuntos, ni sus virtudes. No es cuestión de menospreciar a nadie y todos son capaces de ganar a cualquiera como han demostrado hasta la fecha. Si queremos ganar el 22 de mayo, habra que sufrir mucho e intentar ser mejores que los demás, evidente, pero conociendo el entorno, puede que caigamos en el error de menospreciarlos.
No sabéis que orgullos estamos.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada