El Inter ha sido mejor en los 180 minutos de las semifinales de la Copa de Europa. 38 años después, el conjunto interista llegará a una final de la máxima competición internacional, habiendo eliminado al actual defensor del título, un Barça que ha creído hasta el último segundo en el pase, demostrando de nuevo que las palabras de Pep en su presentación no eran un brindis al sol. Persitieron, persitimos, hasta el final.
Pero como bien se sabe en can Barça, para ganar se debe poner fútbol encima del césped y está noche, el Barça ha puesto poquito. Muy poquito. El Inter ha vivido tranquilísimo durante 80 minutos, a pesar de haber jugado con 10 durante buena parte del partido, consiguiendo con una defensa numantina que el Barça no crease ninguna ocasión de gol.
Antes de que Pique, el mejor jugador de la eliminatoria, marcase el único gol de la noche, solo Bojan con un cabezazo a puerta vacía y Messi con un chute detenido de forma espectacular por Julio Cesar habian conseguido asustar a los italianos. Y es que, cuando todo el mundo pensaba que un cerrojazo era una sentencia de muerte, ha sucedido lo contrario.
Desde el inicio, el balón fue para el Barça. Messi partió desde la banda, pero la abandonó muy rápido. Toure volvió al 11 inicial para jugar de central, desplazando a Milito a la izquierda y mandando a Maxwell al banquillo. El ritmo del balón no era lento pero las ocasiones de gol no llegaban. Cuando el empuje inicial del Barça parecía decaer y el tremendo ambiente del Camp Nou enfriarse, Motta se autoexpulsó.
Pero con el Inter con 10, los de Mou se sintieron más cómodos. No se sintieron culpables por no querer la pelota, y se dedicaron a defender de una forma encomiable. A veces se menosprecia el arte de la defensa. Pero de 100 equipos que intenten hacer lo que ha hecho hoy el Inter, más de 90 se llevan como mínimo 3 goles. Y es que no permitir más de 4 tiros a puerta al Barça en el Camp Nou y con uno menos es de un mérito tremendo.
Messi se perdió por completo entre tanto defensa. No supo leer lo que más convenía al equipo. Lo mismo puede decirse de todo el equipo. Demasiados estáticos, sin desmarques sin balón, y pidiéndola siempre al pie. En estas situaciones quien más sufre el Xavi, que pareció un jugador intrascendente, ya que no encontró nunca los pasillos interiores.
Para intentar abrir el juego, Pep dió entrada a Bojan y a Jefrren. Entraron por Busi e Ibra. Curioso lo del fichaje estrella del Barça, que terminó el partido del año viéndolo desde el banquillo. Vino para desatascar partidos como el de hoy,para que o sucediese el mismo atasco que contra el Chelsea, donde se suponía que el juego de espaldas que tiene ayudaría a abrir defensas. Lo mejor que se puede decir de él es que salió deprisa en el cambio.
La cosa mejoro, pero no mucho. Sea por el cansancio, o por la movilidad que aportaron los cambios, el gol parecía más cerca. La tuvo Bojan, que erró de forma incomprensible. La metió más tarde Pique, con una definición sensacional. Pero ya era muy tarde, aunque Bojan metió una cuando el árbitro ya había pitado una mano de Toure dentro del área.
Se terminó. Los culés deberemos aguantar sacos de porquería sobre nosotros. El primero Mourinho, diciéndonos que no sabemos perder. Después todo lo que dirán desde 612 km. Y luego, ya lo verán, desde aquí. No lo duden. Los hay que lo han pasado muy mal en estos 20 meses. Pero que no lo olvide nadie. Este equipo el sábado se juega muchísimo más que hoy.
La Liga sigue viva y mandamos nosotros. Este equipo tiene crédito. Y tiene a toda la afición detrás, agradeciéndoles todo lo dado hasta la fecha,y persistiendo con ellos para intentar ganar la Liga, y volver, dentro de un año, a Semifinales de la Champions. Sí el Dream Team ganó en el viejo Londres, debe intentarlo en el nuevo.
No sabéis que tristes estamos!!!
The Digital Garden
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