Un partido marcado por circunstancias algo extrañas; desde el inicio, los sudamericanos lucían desconcertados al ver a los aztecas tomar la iniciativa con hasta tres ocasiones claras de gol, que desencajaron los rostros de jugadores, hinchas y técnicos argentinos, mientras los aztecas hacían un fútbol fluido y de buen ver. De pronto sucede lo impensable cuando en el primer ataque albiceleste, se filtra un balón dentro del área que el “Conejo” Pérez rechaza pudiéndolo sujetar, propiciando la asistencia a un “Apache” Tévez que anota el primer gol en posición ilegal.
Hasta aquí las cosas apuntaban a un error de un despistado asistente, cuando en la pantalla gigante del estadio repiten varias veces la jugada dejando ver un claro fuera de juego del jugador del City inglés. La situación se vuelve seria y delicada cuando el árbitro comenta la jugada con su asistente, viendo la realidad reflejada en la gran pantalla, llenando de nervios a nazarenos quienes ratifican el gol con un gesto de culpa y extrañeza, pues las jugadas polémicas y decisivas no deben proyectarse en el estadio según instrucciones de FIFA.
Los jugadores mexicanos estaban desquiciados y los argentinos también reflejaban temor pues ya sentían que tal vez les cambiarían la decisión, cosa que no ocurrió. Pasaron pocos minutos cuando el central Osorio comete el oso de la jornada obsequiando un balón a Higuaín que no perdonó para el segundo gol argentino. Así las cosas, los equipos se van al descanso… y aunque Aguirre realizó un cambio metiendo a Barrera por Bautista, el equipo no tuvo la mentalidad para sobreponerse, ante una Argentina que se creció en el complemento con un excelente disparo de 30 metros del de Fuerte Apache directamente al ángulo de la portería del Conejo para el tercer gol albiceleste.
El partido nunca volvió ser el de los primeros 25 minutos por más ajustes que realizó Aguirre sacando inexplicablemente del campo a Guardado… moviendo a un nefasto Osorio al lateral derecho y bajando a Márquez al eje central. Aún así, a partir del minuto 65, los aztecas retoman cierto control del partido, y el Chicharito Hernández hace una gran recepción y bate al portero Romero con un fuerte disparo de zurda para el gol azteca. Posteriormente ingresa el Guille Franco… quien no pudo hacer gran cosa, como tampoco pudo durante todo el torneo. Nos cuesta entender como el Vasco Aguirre no aprovechó a ciertas joyas futbolísticas como Barrera, el Chicharito Hernández y Andrés Guardado, con muy escasos minutos en el torneo, para dar entrada a jugadores intrascendentes como el Guille Franco, Bautista, y a un veteranísimo Blanco.
En el resultado Aguirre lleva su penitencia. El 3-1 del marcador no puede ser muy fiel a lo que se vio en la cancha, pues las circunstancias no fueron para nada favorables a los aztecas, quienes tampoco merecieron mucho más al no poder sobreponerse, pero deja en evidencia que el equipo sudamericano tiene una delantera espectacular, pero su defensa y media cancha deja mucho que desear.
El blaugrana Márquez tuvo un buen desempeño sin ser espectacular, pero supo construír algo de fútbol en la media cancha, cosa que ningún mediocampista argentino pudo lograr… salvo los enormes detalles del apache Tévez que fue sin duda el mejor jugador del partido. Tal vez Márquez en verdad conoce muy bien a Lionel Messi, pues lo supo frenar al igual que a los delanteros sudamericanos, con excepción de un inmenso Carlos Tévez.
No sabéis las expectativas que tenía de ver un partido bonito… pero semi-destruído por malas decisiones arbitrales!!!
Caesar999 & The Digital Garden.
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