Golpe de autoridad brutal, espectacular, trascendental del Barça en el Madrigal. Con poco tiempo de recuperación, en el campo de uno de los mejores equipos en la segunda vuelta, y con la moral baja después de la eliminación, los hombres de Guardiola se llevaron los 3 puntos a Barcelona y siguen sin ceder ante la presión del Madrid.
Desde el inicio del partido, el Barça salió decidido a demostrar al mundo enteró que sigue de píe. Presionó desde el minuto uno la salida de balón de los locales, volvió al dibujo clásico, con dos extremos( Bojan y Pedro) y Messi delante, y la pelota circuló con la velocidad que se echó de menos durante buena parte del partido ante el Inter. Ayudadaba, eso sí, el juego alegre y atrevido del Villarreal.
Durante los 10 primeros minutos, ninguno de los dos conjuntos era capaz de robar al contrario. Las ocasiones se sucedían en ambas porterías. Pero poco a poco el balón solo tuvo un dueño, el Barça. Entorno a Xavi, y a la movilidad de Pedro y Bojan, encerró a su rival en la portería, pero éste lograba amenazar a Valdés en alguna contra, siempre lanzada por Ibagaza.
Pero la Fe amarilla terminó con un mano a mano errado por Nilman y el gol de Messi. Fue un gol de 9, con un control orientado perfecto que le dejó solo ante Diego. El pase del gol, como no, de Xavi. El mismo que, con una lesión en el soleo, marcó el 0 a 2 de falta directa, dejando el partido encarrilado para los de Guardiola, que apoyados en las gradas por cerca de 4000 culés, siguieron persiguiendo el tercero.
Gol que lo marcó Bojan. Se disfrazo de Messi y convirtió un balón intrascendente de 35 metros de la portería un una jugada preciosa, con caño y pase orientado, batiendo con sangre fría a Diego. Antes había iniciado el gol de Mesi con un robo, lo que certificaba su gran momento de forma, ya que en los últimos dos meses su rendimiento ha dado un salto de calidad enorme.
Podía parecer que el partido estaba sentenciado, pero el inicio de la segunda mitad del Villarreal puso en aprietos al Barça. Se hizo amo del balón, lo jugó en campo contrario y llego siempre con peligro al área. Senna impuso su fuerza en el centro del campo y el Barça comenzó a sufrir. Pero el arreón amarillo no tuvo recompensa y poco a poco el partido volvió a la dinámica de la primera mitad.
Aunque sin el mordiente blaugrana arriba. No lo neceistaba en el marcador y , quizá, no le daban las fuerzas para apretar. Cuando tuvo la pelota, lo hacía de forma más horizontal, y más retrasada. Así las llegadas a la portería de López desapareción. Y cuando más tranquilo parecián los hombres de Pep, llegó el gol de Llorente, hombre que le tiene tomada la medida a los culés y que pusó el miedo en el cuerpo al Barça.
Poco acusó el golpe el Barça. Imprimió más verticaliad a su juego, y terminó el peligro sobre Valdes. En un par de ocasiones tuvo el cuarto, con jugadas de Bojan y Messi. Con 10 minutos para el final, Pep metió el primer cambio, Toure por Busquets. Algo extraño le sucede a Pep, pues el equipo daba señales de necesitar aire y tardó, una vez más, mucho en aportarlo.
Con Toure el equipo se asentó más, pudo adelantar las líneas unos metros y, de esa forma alejar el posible peligro y amenzar más al rival. Así llegó el cuarto, segundo de Leo, marcando a placer una jugada entre Xavi y Alves. El partido terminaba y el Barça, confirmaba que, pase lo que pase de aquí al final de Liga, es un equipo decidido a persistir para hacerse un hueco aún más grande en la historia.
No sabéis como hemos gozado!!!
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