Nunca el fútbol había generado tanto ruido como ahora. Pero tampoco nunca antes se había hablado tan poco de fútbol y tanto de todo lo que se genera alrededor de lo más importante del juego, la pelota. Quizá por eso el Barça se pase la vida justificando cada uno de sus logros y quizá por eso no nos demos cuenta de ver lo que está cambiando este deporte.
Lo está haciendo lentamente, necesitándose atención para verlo, como el London Eye que no aprecias el movimiento si no te detienes. El Barça tiene buena parte de culpa de esa transformación, ya que está desplegando un fútbol avanzado a su tiempo y está arrastrando al resto, con mejor o peor suerte, a seguirle los pasos.
Pero también está cambiando la localización del fútbol. Hoy en día es un deporte mucho más global que hace 20 años, cuando era impensable que un coreano fuese titular en el Campeón de la Premier, o que el Campeón de la liga de Ucrania elimine a un equipo italiano como la Roma, siendo incluso favorito antes de disputarse el encuentro.
Y es que la Liga italiana, a pesar de tener dos campones de la Champions en los últimos 5 años, está más cerca de ser la quinta Liga en el ranking FIFA que de ser la segunda o tercera. Pero también sucede con la Liga española, que ve como la Bundesliga comienza a ganarle terreno( no lo decimos por lo del Shalke, más un accidente que otra cosa)si es que no le ha tomado la delantera ya.
Pero en España estamos discutiendo hasta la saciedad si es más importante un penalti no pitado o una expulsión rigurosa. O le damos más importancia a los motes de unos jugadores que al golazo del que va camino de ser lo más grande que ha habido en el deporte. Cuando de repente, países como Rusia o Francia nos adelanten, será la época de culpar el reparto televisivo y todas esas cosas. O más fácil aún, culpar al Barça , que parece ser el deporte nacional.
Ahora, hay dos equipos españoles en cuartos. Sí, el Shalke y el Barça, que junto al Shaktar y el Tothenam ya están esperando rivales para la próxima ronda de la competición. Fuera han quedado el segundo de la Liga Inglesa y el líder de la Liga italiana. En óptica blaugrana, ninguno de los 3 tiene más armas de las que tenía el Arsenal.
Con lo que son buenísimas noticias. Los alemanes no han demostrado ser superiores al Valencia, aunque tampoco inferiores ni ser mejores que hace 3 años cuando la suerte le cruzo al último Barça de Frank. Los ingleses sí que tienen peligro, sobretodo velocidad arriba y creatividad en medio, pero no son mejores que los chicos de Wenger.
El tercero en cuestión son los amigos de Chygry. Suelen tener el dominio de los partidos, con fútbol atrevido y abierto, pero manejan mucho y bien los cerrojazos. Por fortuna, y tocamos madera, para esos casos este año contamos con Iniesta, capaz de en una chispa de genialidad abrir la más segura de las cerraduras.
No sabéis cómo estamos cambiando!!!
The Digital Garden.
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