Dejar el devenir del partido en manos de Lakovic es no recordar los años negros de la sección, donde con el esloveno de 1, el equipo no era nunca competitivo en los momentos decisivos. Hoy ha sido él quien ha dirigido el Barça en los momentos claves y hoy ha perdido el Barça.
No es toda su culpa, pero Jaka es un jugador engañoso. Sus triples y anotación puede parecer positiva para el equipo, pero a la larga siempre es perjudicial, por meter a sus compañeros en un ritmo que para nada les beneficia. Partido irregular el del Barça que va a Atenas con la obligación de ganar 1 encuentro.
Desde el primer bote de pelota, se vio que la defensa del Barça sería mucho más agresiva que en el primer encuentro. Ricky estaba más encima de Diamantidis y eso provocó que no existiera fluidez en el ataque y que los griegos perdiesen 5 balones en ataque.
No los pudo aprovechar el Barça, que intentó correr, pero no lograba anotar en ataques rápidos. Eso hizo que los guarismos del primer cuarto fuesen tristes y que no rompiese el partido a pesar de los 10 puntos que anotó el Panathinaikos en el primer cuarto, ya que la zona continuaba sin ser leída bien por los bases.
Cuando pudo correr por conseguir cerrar el rebote defensivo y enlazar tres ataques rápidos, el Barça se fue del marcador en los primeros minutos del segundo período, alcanzando una renta de 16 puntos, teniendo en el banco a Navarro y Anderson, demostrando la profundidad de la plantilla de Pascual.
Un tiempo muerto de Obradovic consiguió cerrar el aro a los locales, y con un Batiste que se hizo el amo de las dos zonas logró un parcial de 0 a 9. Así, el equipo de Obradovic volvía a meterse en el encuentro, a pesar de que la diferencia no bajo más. A partir de ese instante, ambos equipos intercambiaron aciertos y errores por igual, terminando la primera parte con 10 puntos a favor de los locales.
Para intentar cambiar el signo del partido, Obradovic y los suyos decidieron dinamizar el partido. Sus ataques eran más cortos y la defensa con presión en tres cuartos de cancha. Esto convirtió el partido en un corre calles que desorientó al Barça.
Por momentos, se olvidaron del juego colectivo y del pase extra y todo se basaba en tiro de tres sin opciones de rebote. Entró Lakovic que no pasa por ser la mejor opción cuando el equipo necesita pausa y decisiones acertadas para encontrar tiros cómodos.
Desafortunadamente para los azulgrana, el juego de los locales mejoro al poco de entrar Jaka, ganándose la confianza de Pascual, que veía también como ss otros dos bases no estaban acertados, para el resto del encuentro.
A partir de ese instante el juego fue partido tuvo de todo, pareciéndose mucho al primero. Se igualó mucho el marcador hasta que en una jugada defensiva muy agresiva del Panathinaikos, Navarro colmó la paciencia de los colegiados y le señalaron una técnica por sus reiteradas protestas.
Fue aprovechada por los griegos que iniciaron el último cuarto a un solo punto. Y fue en ese instante donde el mejor jugador del Barça, el Palau, comenzó a rugir para intentar ser protagonista en un partido de 10 minutos, en el que su equipo pudo ahorrarle sufrimiento y terminó reclamándole para poder conseguir la victoria.
Con la dinámica positiva para el Panathinaikos, se encendieron todas las alarmas cuando se pusieron 4 arriba, manteniendo la defensa con las manos y con ataques percutiendo por dentro para anotar de fuera.
Un tiempo muerto de Pascual ayudo a mejorar la defensa y frenar el ritmo de anotación griego. Pero en ataque se continuaba igual de espesos, con un Navarro más preocupado de protestar que de jugar, con un Ricky incapaz de anotar de tres solo y con los pivots sin oler la pelota en la circulación.
Con todo, el público culé ayudo a que el Barça tuviese una posesión para ganar, aunque a falta de 1 minuto pareciese imposible. La desaprovechó Jaka, con una decisión inexplicable por el tiempo en que la tomo y por la dificultad que representaba anotarla. No entró y victoria visitante por 4 puntos.
Ni con un Palau en su mejor versión en el momento clave, ni con una ventaja de 16 y ni con el rival perdiendo balones cada minuto en el inicio el Barça no pudo ganar el segundo encuentro de la eliminatoria.
Se discutirá si fue por errores propios o virtudes del rival, pero lo cierto es que no supo nunca, ni cuando iba por delante, jugar como requería el partido, siendo incapaz de frenar el juego griego cuando estaba lanzado.
No sabéis que paso atrás hemos dado!!!
The Digital Garden
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada