FC Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Puyol, Maxwell; Touré (Sergio Busquets, m.85), Xavi, Iniesta; Pedro (Keita, m.60), Ibrahimovic (Bojan, m.76) y Henry.
RCD Espanyol: Kameni; Roncaglia, Pareja, Víctor Ruiz, Chica; Forlín, Baena (Javi Márquez, m.46); Luis García, Verdú (Callejón, m.46), Corominas (Ben Sahar, m.76) e Iván Alonso.
¿Quien decía que los derbys entre cules y pericos estaban de capa caída? Tras los dos últimos derbys vistos en el Camp Nou, éstos han recuperado todo su esplendor, toda épica y sobretodo toda su rivalidad. Porque si en la primera parte vimos parte del mejor repertorio de este Barça, borrando del mapa al conjunto blanquiazul, con mucho juego por las bandas y mucha combinación, en la segunda vimos un autentico patio de colegio, con numerosas imprecisiones, muchas faltas y mucha dureza. Y poco fútbol.
Empezó con ritmo el partido, con un Espanyol más ofensivo que lo que se había anunciado. Solo dio esa sensación, porque en el segundo 15 Coro tuvo una clara ocasión desde dentro del área que envió fuera. La réplica culé fue tras un córner que remató Piqué y paró el camerunés Kameni. Los azulgrana lo probaron entrando por las dos bandas, con un Pedro muy móvil y poniendo en serios problemas a su marcador, Chica, que ha cuajado una primera parte horrible, siendo superado por todo aquel que pasara por la banda derecha culé. La respuesta perica no llegó hasta el minuto 14 con un buen tiro de Joan Verdú que sacó Valdes enviando el balón a córner, ahí se acabó el Espanyol en toda la primera parte.
El Barça ahí cogió al perico, perdón, al toro por los cuernos y se dedicó a hacer lo que mejor sabe. Tocó el balón de un lado a otro, entrando por la izquierda ahora, más tarde por la derecha y cuando hacía falta se probaba por el centro. Muchas ocasiones no hubieron, pero sí mucha sensación de peligro. Primero un tiro de Henry al palo largo, que despejó Kameni, tras una delicatessem de Ibra. Una clarísima, de Pedro, que tras robarle la cartera a Chica, la envió fuera con todo a favor para batir a Kameni. Lo probó de lejos Alves, pero salió alto. Lo mismo que Maxwell, que volvía al equipo titular y que tiró fuera tras otra asistencia asistencia del sueco.
El gol no llegó hasta el minuto 38 tras un penalti de Baena a Xavi, menos claro que uno que le habían hecho a Ibra anteriormente. La pena máxima la anotó Ibrahimovic, reventando el balón. Tras el gol, el Barça lo siguió probando, por ambas bandas pero el resultado ya no se movió.
La segunda parte prometía más de lo mismo, pero no fue así. El Barça salió muy relajado y el Espanyol lo aprovechó para inquietar al Camp Nou. Fue llegando poco a poco, estirando las líneas y notando mucho la entrada de Javi Marquez y de Callejón. Dejó mejor sensación, pero no creó ocasiones claras, la que más, un tiro inocente de Ivan Alonso.
El partido se fue caletando con entradas duras, a destiempo por ambos bandos y ahí el colegiado se le fue el partido de las manos. El Barça tampoco llegó al marco de Kameni y el resultado no se movió, llevándose los azulgranas los 3 puntos.
No sabeis lo que nos gusta ganar al Espanyol.
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