Por si lo que habíamos visto en estas 2 semanas con Madrid, Inter, Depor y Dinamo, no era suficiente, lo que nos espera este fin de semana no es otra cosa que un Derby Metropolitano o local, lo que ustedes quieran, pero un derby en toda regla.
Es cierto que un Barça – Espanyol enciende más pasiones por el lado periquito que por el culé, pero lo vivido en estos últimos años ha encendido un poco más los ánimos a la parroquia del Camp Nou cada vez que el rival metropolitano, o ciudadano, como quieran, visita el coliseo barcelonista.
Primero fueron los continuos desplantes por parte de la directiva dirigida por Sánchez-Llibre derivados por el affaire Saviola. Luego fue el Tamudazo con la celebración posterior como si hubiesen ganado un título (venían de la final de UEFA donde muchos culés les apoyaron) y por último, el partido del año pasado.. con un De la Peña visiblemente resentido y un partido lleno de tensión y polémica.
Visto los precedentes, tanto unos como otros se cogerán con las ganas que un partido de este tipo merece. Es cierto que los 2 equipos llegan en situaciones totalmente antagónicas. Los de Pep llegan como un tiro sumando 4 victorias en los últimos 4 partidos de vital importancia, y los de Pochettino vienen de encajar dos goleadas consecutivas.
A priori, el Barça no debería tener problemas para sumar los 3 puntos, pero sin ir más lejos, nos acordamos del partido del año pasado, en el que un Espanyol hundido en las catacumbas del descenso, se llevó los 3 puntos del Camp Nou maniatando al Barça sin apenas dejar que se jugase a fútbol.
Suponemos que en Can Perico ese partido sigue muy fresco en su memoria, ya que a partir de ahí, su ascensión hacia la salvación fue meteórica. Pochettino, no nos cabe ni una duda, tratará de emplear las mismas armas para frenar al actual tricampeón; es decir: tratar de que se juegue el menor tiempo efectivo posible, y mantener las 3 líneas muy juntas.
Guardiola, por su parte, debería concienciar a sus pupilos que el derby dura 90 minutos y que el partido no se gana en el minuto 2. Ese fue uno de los errores del Barça en ese partido y en muchos otros importantes, donde el equipo sale revolucionado y extra motivado provocando así, una sucesión de errores provocados por esta sobreexcitación.
Todo esto sin Messi, cazado el pasado miércoles en Kiev, pero con el resto del arsenal disponible. El equipo y el entorno salieron muy reforzados del partido ante el Inter, en el que se ganó y se convenció sin el argentino y sin Ibrahimovic. No se ha hecho un drama por la ausencia de Leo el sábado y eso beneficia a todos.
Última parada del Barça en Liga antes de partir hacia Oriente Próximo donde espera la corona mundial, el único título que falta en el Museu.
¡ No sabéis las ganas que le tenemos al Espanyol!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada