LFP J9 Granada - F.C.Barcelona 1 : Tres puntos y nada más

Los aficionados que se gastaron más de 100 euros para ver al Barça en Granada no tardarán en olvidar el partido. Pero será por el recuerdo el hecho en sí, no por el espectáculo. Con la colaboración de un pésimo colegiado, el Barça hizo uno de sus peores partidos de la era de Pep, aunque se llevó los 3 puntos, gracias a un golazo de Xavi de falta.

 

 

Sorprendía Guardiola con la inclusión en el 11 de Cuenca, dando descanso a Villa. También descansó Iniesta, permitiendo salir de inicio a Cesc, que jugó por primera vez con Xavi  y Busi en un centro del campo de 3. Atrás Maxwell jugaba por Adriano, que no puede jugar más de 2 partidos seguidos.

La imagen no pudo ser peor. Sí, así de claro. Obvio que los jugadores lo dieron todo, que corrieron y pelearon, que no se entregaron y que merecieron la victoria porque el rival no chuto ni una vez a puerta. Pero no decir que apenas se crearon 4 ocasiones claras de verdad y que el equipo cedió la pelota cuando se encontraba con superioridad numérica sufriendo ataques muy peligrosos seria no decir la verdad.

El inicio del Barça fue académico. Teniendo el balón siempre, jugando mucho por la banda. Primero con los extremos abiertos, especialmente dañino Cuenca por la izquierda, y después con los laterales abiertos y los dos extremos jugando por dentro dando continuidad a la circulación de balón.

Las ocasiones fueron llegando. Primero Messi a punto de culminar una gran jugada colectiva con un regate prodigioso dentro del área, después dos jugadas de Cuenca que apunto estuvieron de ser gol. Pero poco a poco la fluidez y lucidez de los de Guardiola se fue marchando poco a poco.

Cuando peor estaba jugando el Barça, llegó el gol de Xavi. Un golazo de falta del hoy capitán cule, que puso la pelota donde no podía llegar el cancerbero granadino, que había tenido menos trabajo del que seguramente se esperaba en la previa.

Y todavía vivió más tranquilo en la segunda mitad. Las oportunidades del Barça eran de chutes lejanos. Solo tuvo que intervenir en un mano  a mano con Cuenca. Un pase de Xavi dejó solo al canterano que vió como Roberto le tapaba todos los huecos y no puedo superarlo. A partir de ahí el Barça sufrió, aunque no concedió remates a puerta.

Sufrió porque primero el juez de línea y después Valdes lo evitaron. Un pase al espacio dejó a Geijo solo delante del portero. Estaba en posición reglamentaría pero se señaló fuera de juego, aunque el delantero continuo la jugada y Valdés la detuvo, ambos no se percataron de lo señalado por el línea.

Antes, Pedro se había lesionado de forma muy aparatosa, pudiéndose hacer muchísimo daño, pero que parece que quedará en menos.  En la misma jugada, el Granada vió como por doble expulsión de Javi Romero se quedaba con 10. Un partido de guante blanco tuvo más de 10 amarillas. Muñiz confundió el respeto con la mano fácil, señalando amarillas por faltas que no lo merecían, creado malestar entre ambos conjuntos.

Pero fue cuando jugaba con 10 que el Granada estuvo mejor. Se estiro, perdió el miedo y se atrevió a tener la pelota. No chutó a puerta, pero creo mucha sensación de peligro, llevando la pelota cerca del área y obligando a la defensa culé a dar lo mejor de sí misma, ya que ni los delanteros ni los medios conseguían robar la pelota de forma rápida.

Al final el partido acabó con victoria. Lo mejor sin duda del encuentro, junto con el debut de Cuenca, que será más que útil en estos partidos donde ni Alexis ni Pedrito estarán disponibles. Para que el chico crezca, el equipo debe mejorar mucho. SI lo hace, tal vez, todavía parecerá mejor.

No sabéis que mal lo hemos pasado!!!

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