Las posiciones de Cesc

Muchos éramos los que defendíamos que Cesc no debía ser un fichaje prioritario. Las razones iban más allá de lo futbolístico. Las circunstancias en las que marchó y el mensaje que se daba a la cantera nos hacían defender otras alternativas para reforzar la plantilla culé. Lo que nunca negamos, es que de los centrocampistas en el mercado era el mejor.

Evidentemente, la calidad de Cesc es innegable y el rendimiento que está dando se defiende por sí solo. Sobre todo después de su primera lesión. Hasta ese momento, Cesc había destacado más por sus goles que por su influencia en el juego combinativo, llegando a confesar el mismo que  le estaba encontrando la posición.

De hecho, esto último nos cuesta a nosotros. Pero no es un aspecto malo, es algo positivo. Su movilidad, su facilidad para encontrar siempre el espacio libre para pedir el balón es algo muy importante, ya que da siempre dinamismo al juego. Además, es capaz de ocupar 3 o 4 posiciones distintas durante un partido.

Contra el Levante se le vio jugar de falso 9, de interior o jugando pegando a la banda, haciendo de extremo cuando Alexis tiraba la diagonal hacia el centro.  En todas ellas supo interpretar lo que le pide Guardiola, aunque eso a veces le suponga participar menos en el juego de lo él está acostumbrado.

De cara al clásico, la gran duda que tiene todo el mundo es si Cesc será de la partida o no. No nos mojamos, son tantas las posibles combinaciones que no sabemos cuál es la mejor para hacer daño al Madrid. Lo que sí es cierto es que ante el Madrid o cualquier rival, la movilidad que muestra partido tras partido ofrece al Barça un abanico de posibilidades que le vienen muy bien cuando no se está del todo fino.  

Vean  a continuación unas fotos de Cesc ocupando  distintas zonas del campo en el encuentro contra el Levante.

  

 

 

 

Todo lo dicho no significa que hayamos cambiado de opinión. Nuestra negativa a ficharlo era por cuestiones no futbolísticas. Sí hablamos de fútbol, las dudas desaparecen. Y lo mejor es que todavía le queda mucho a Cesc para mejorar. Cuando sepa entrar en juego como Iniesta o Xavi ante defensas cerradas y sin espacios, estaremos hablando de un jugador superlativo. Pero eso es lo más difícil del fútbol, aunque no está lejos de conseguirlo.

No sabéis lo bueno que es Cesc!!!

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