En el deporte, habitualmente los homenajes condicionan el estado anímico de aquellos que lo reciben. Suelen aturdirse y tardan algo en quitarse de encima las emociones vividas. Marconato y Basile deben estar hechos de otra pasta, porque después de la tremenda y emocionante ovación dedicada a Basile, y en menos medida al pívot, salieron enchufadísimos en el encuentro, aunque eso no les permitió llevarse la victoria del Palau.
Eso a pesar de que con 6 puntos de Marconato y un triple de Baso, el Cantu cogió pronto amplias diferencias en el marcador, mandando todo ese periodo y sobretodo por la escasa defensa culé. El arma fuerte de los de Pascual, hacía aguas por todas partes, incapaces de detener los continuos bloqueos planteados por los italianos. Hasta que apareció la defensa, el Cantú era amo y señor del partido.
Pero a medida que pasaron los minutos, el Barça se metió en el partido y comenzó a defender como lo ha venido haciendo hasta la fecha. Pero para remontar los 8 puntos de ventaja que había concedido, tenía que atacar mucho mejor. Y lo consiguió, gracias a los triples de Marcelinho y de los rebotes ofensivos que capturaban Lorbek y Perovic.
En el momento que el acierto desde fuera se acabó, el Cantú volvió a dominar el marcador. Nuevamente, aparecían los problemas en ataque del Barça, incapaz de imponer el ritmo de partido a sus rivales, siendo el antítesis de aquel equipo que enamoró hace 2 años.
Tanto es así, que al descanso tan solo había anotado 28 , con un porcentaje bajísimo en los lanzamientos a canasta producto de unos ataques nada fluidos, haciendo que las posiciones de tiro fuesen siempre muy forzadas, algo que por momentos llego a desesperar al Palau, a pesar de que su equipo tan solo estuviese abajo en el marcador al descanso( 28-30).
Ambos equipos salieron de los vestuarios con las energías renovadas. De repente, lo que estaba siendo un recital de errores, se convirtió en un carrusel de canastas. Contra lo que pudiera parecer, tampoco lograba el Barça ponerse por delante, ya que gracias a Basile los italianos le aguantaron el ritmo a los locales.
Pero no fue con la mejora de ataque con lo que el Palau entró en ebullición. Como no, una surrealista técnica pitada a Eidson, encrespó los ánimos de los aficionados. Con todo el Palau empujando, la intensidad defensiva de los de Pascual aún subió un punto más y cerró la canasta.
Ese arreón en el final del tercer cuarto le permitió iniciar los últimos 10 minutos con tablas en el marcador( 49 a 49).Pero no le permitió escaparse en el marcador. Y es que la racha anotadora se terminó, el parcial entre ambos en 4 minutos fue de 3 a 2.
A 6 minutos del final estaba el encuentro donde querían los italianos. Marcador bajísimo en el que las defensas eran las protagonistas. Lo que sucede es que no hay nadie que se desenvuelva mejor que el Barça en esas circunstancias, porque cuando las fuerzas comienzan a fallar, a los de Pascual siempre les queda gasolina para ahogar a sus rivales.
Así, rompió el partido, ya que el Cantú no anotaba nada( 4 puntos en 7.30) y en ataque habían aparecido Lorbek y Eidson, para conseguir una ventaja de 8 puntos al entrar en los últimos 120 segundos, dejando finiquitado el prime encuentro del TOP 16.
Al final el resultado fue de 65 a 60 , dejando nuevamente el Barça a un equipo por debajo de los 60 puntos, algo que es ya habitual y que refleja claramente el baloncesto que está practicando el Barça. Veremos si con reaparición de J.C.Navarro todo cambia.
No sabéis como nos cuesta anotar!!!
The Digital Garden.
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