El Barça ganó 3 a 1 al A.C.Milan y se clasificó para su quinta semifinal consecutiva en la máxima competición continental. Lo hizo de manera justa. Fue mejor que el rival en la vuelta, aunque los italianos sorprendieron a casi todos plantado cara y cayendo con la cabeza alta, aunque su defensa de cristal fue una losa demasiado grande para contrarrestar el poderío atacante culé.
A los 10 minutos ya ganaba el Barça. Marcó Messi de penalti. La jugada fue una sucesión de errores principales de los italianos. Primero Mexes regalando el balón al argentino, después cuando se había podido arreglar el error del francés, fue Antonini quien dentro del área se dejó robar la pelota por Leo y lo derribo cuando encaraba al portero.
Antes ambos equipos tuvieron claras ocasiones. Siempre en contraataques y con los atacantes pillando a las defensas muy adelantadas. La del Barça estaba formada por 3 jugadores. Alves salió desde el inicio pegado a la línea de cal, actuando como extremo. En la otra punta estaba Cuenca. En medio, Cesc, Xavi, Iniesta y Leo para intentar dominar el partido y defender con la pelota.
Pero no lo consiguieron. Bien es cierto que ocasiones tuvo el Barça, pero no podía detener la potencia de los centrocampistas italianos, que cuando robaban se incorporaban con peligro, llegando incluso a tener posesiones largas de la pelota, siempre con Seedorf como eje de todo, a pesar del lastre que supone tener a Ambrosini como mediocentro.
En una de las contras, Ibrahimovic consiguió encontrar dentro del área a Nocerino que batió a Valdés en el que era el primer chute a puerta del Milan, pero no la primera ocasión. Era el justo premio al equipo italiano que se mostró mucho más valiente que en anteriores ocasiones, llegando incluso por momentos a imponer el ritmo de partido que más le convenía, impidiendo las posesiones prolongadas del Barça.
Cuando más callado estaba el Camp Nou, asimilando todavía el golpe, el árbitro castigo como penalti un agarrón de Nesta a Busquets dentro del área, algo que extrañó al equipo visitante, que se preguntaba si el reglamento había cambiado respecto al partido de Ida. Messi no falló y el Barça se fue al descanso con ventaja.
Tras la reanudación Guardiola se dejó en el banquillo la defensa de 3. El propósito de dominar llenado el centro del campo no se había logrado. Paradojas de la vida, con un hombre menos por el centro y con Iniesta pegado a la izquierda, la pelota le duraba más al Barça. En parte fue porque Alves de extremo es un buen jugador y cuando juega de lateral se convierte en dos extraordinarios jugadores.
Seguramente ayer cuajó uno de sus mejores partidos como barcelonista. El y Busquets, impidieron que las contras del Milan se transformasen en chutes a puerta, ya que siempre conseguían cortar el último pase cuando un jugador milanista se disponía a rematar solo frente a Valdés.
El Milan se lo jugó el todo por el todo incluso antes del tercer gol culé. Descolgaba a 3 jugadores de forma descarada y cuando conseguían robar los encontraban en posiciones de mano a mano frente a Piqué, Puyol y Mascherano. Ahí, el trabajo de Busquets equilibrando y ocupando los espacios libres y de Alves haciendo las coberturas resultó tan vital como el gol de Iniesta.
Por segunda vez consecutiva, Leo Messi dio un gol a Iniesta. Fue una jugada individual del argentino, en la que tras algún rechace, la pelota cayó en los pies de Iniesta dentro del área, que con una tranquilidad espectacular batía a Abiatti sin problemas, desatando la locura a un Camp Nou lleno hasta la bandera.
Quedaban 30 minutos hasta el final y el Barça pudo ampliar claramente el marcador, pero la falta de definición de los barcelonistas privó que el Milan se fuese con un saco de goles. Seguramente hubiese sido injusto, pues el resultado final de la eliminatoria refleja justamente la diferencia que ha habido entre los dos equipos.
El Milan puede irse contento porque después de varios años lejos de la élite, vuelve a mirar a los ojos a los grandes y pasea con orgullo a hombres como Seedorf, que se llevó una ovación de gala del público. El Barça puede presumir de ser el primer equipo de la historia moderna en encadenar cinco semifinales consecutivas. Lo hace siendo terrenal, dando imagen de cierta vulnerabilidad, pero siendo mejor claramente que el rival.
No sabéis como presumiremos de esta época!!!
The Digital Garden.
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