Se ha repetido hasta la saciedad, pero no por ello deja de ser curioso. Las similitudes que tienen los 10 días que nos esperan con lo que el barcelonismo vivió hace 3 años es sorprendente. Tanto que ni hecho aposta saldría mejor. Tan parecido y tan distinto que llega a asustar los paralelismos que se pueden crear en la mente de cualquiera.
El propio Guardiola ya ha advertido alguna de vez de ello. Los cabalistas sacarán humo para intentar encontrar algún hilo que una el pasado con el futuro. Pero lo que pasó ya no se puede cambiar, afortunadamente, y lo que va a pasar nadie lo sabe y dependerá de muchos factores, entre los que destacamos el psicológico.
A nuestro juicio , no dejar que el resultado de un partido afecte al otro debe ser primordial. Una derrota en Londres no debe causar que el equipo llegue sin ilusión ni ganas en continuar la remontada contra el Madrid. Ni un traspié contra los de Mou debe suponer un mazazo que complique la vuelta de la Champions.
Los aficionados debemos aplicarnos el mismo cuento que los jugadores. No debemos caer en dramatismos absurdos ni en euforias desmedidas por un resultado. Con vivir día a día y partido a partido hay suficiente. Porque a pesar de que en los últimos años no hemos vivido muchos sinsabores, es más que posible que alguno de los 3 títulos no se terminen ganando y poco o nada cambiará a la tremenda temporada que están haciendo los chicos de Guardiola.
Hace 3 meses, se discutía sobre el hambre de los jugadores culés después de haberlo ganado todo. Hoy, justo cuando está a punto de comenzar 10 días de locura, hay que reconocerle a este equipo que si algo ha demostrado es tener hambre competitiva. Peleo con todo para eliminar al Real Madrid en Copa, no se ha dejado ir en la Liga a pesar de tener una clara desventaja y sigue peleando el titulo más glamuroso de todos, La Champions.
Guardiola tiene miedo de que suceda lo contrario que hace 4 años. Sufre por si el Madrid gana fácil en el Camp Nou cuando todo el mundo interioriza que saldrá perdedor, se inquieta por las consecuencias de la sensación de superioridad total que parece tener el Barça ante el Chelsea, cuando el Barça lleva 5 partidos sin ganarles.
Después de los 3 mejores años de la historia del club, lo único que no se debe tener es miedo a nada. O sí, pero no ahora, quizá dentro de 10 días, pero eso ya es otra historia. Ahora, hay que disfrutar con un equipo que pelea todas las competiciones de la misma forma sin importar la importancia de la misma y las dificultades que se le ponen por el camino.
A lo mejor estos 10 días terminan mal. Pero a lo mejor dentro de 10 años recordaremos como algo bueno el tener la oportunidad de vivir semanas así de grandes. Lo que ahora es algo rutinario, es una cosa excepcional de vivir. Disfrutemos de ello, que para sufrir ya habrá tiempo.
No sabéis como nos gustan estas semanas!!!
The Digital Garden.
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