Todo tiene un límite y los acontecimientos de esta semana han sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de Laporta y su junta. Todo lo publicado en la “NO NOTICIA” del interés de Florentino de quitar a Messi del Barça han provocado que el Laporta vehemente que no se reconoce vuelva a la luz pública.
En el antepalco, ante los micrófonos de BarçaTV, dijo lo que buena parte de los aficionados esperaban. Responder con contundencia a lo que se considera desde el barcelonismo intentos de desestabilización del madridismo. Lo que pasa es que Laporta confundió la velocidad con el tocino.
Con cara seria, el tono vehemente que tanto se le ha criticado cuando el discurso no es el que se quiere oír, esta vez se le ha perdonado por estar el contenido en consonancia a lo que piensa gran parte de la prensa catalana. “ Es una lucha desigual, porque el Madrid cuenta con el apoyo de las instituciones que pagan todos los españoles, en especial los catalanes”
Se podría decir mil cosas al respecto de todo lo que ha sucedido en estos días, pero no se puede decir lo que ha dicho. Primero porque el Barça también tiene el apoyo de las instituciones( o ¿hay alguien que piensa que la Generalitat y el Ayuntamiento no “apoyan al Barça?, por no hablar de TV3…) y porque en caso que sea cierto que los catalanes paguen las instituciones a las que se refiere Laporta, no lo es menos de que son más los catalanes no culés que los que sí lo son.
En la zona mixta, se tenía solo un objetivo, que no era otro que conseguir que Messi dijese a todos los culés que no se irá nunca al Madrid y que jura amor eterno al Barça.
Se le volvió a preguntar a Guardiola sobre el tema, a cada uno de los jugadores que iban saliendo por la zona mixta, pero quien se llevó el premio fue la televisión del club. Al final del partido Messi se encaminó a los estudios que tiene detrás de los vestuarios y allí hizo felices a todos los culés del mundo.
“Yo jamás me he querido ir de este club. Si me voy, es porque me echan, no porque yo me quiera ir", “Siempre se has portado de manera extraordinaria conmigo desde chiquito”. Fin a la polémica. Fin al virus de hipocondría que se había instaurado en el corazón del entorno está semana.
Faltará por ver si no pagarle lo que él considera justo es echarlo, o tratarlo igual que el resto es echarlo, o que considera Messi no quererle. Pero eso pasa con todo el mundo. Messi, por primera vez, no ha sido ambiguo, y ha dominado bien los tiempos. Ha sido claro en el momento oportuno y en el lugar oportuno. De lujo…
El otro foco de atención era Samuel Eto’o. Después que ni el cuerpo técnico ni los jugadores hiciesen sangre del incidente de la semana pasada entre el delantero y el técnico, solo faltaba saber que es lo que pensaba sobre el altercado Eto’o.
Contra lo que era de esperar, el jugador no rehuyó la polémica. La admitió sin más, pero le resto importancia. “Son cosas del fútbol, no es cierto todo lo que se ha dicho, no fueron unos estiramientos, pero es igual. Ya pasó y todo fenomenal”. Quien mejor ha resumido el caso ha sido Estiarte, que considera que lo que sucedió fue que “el jugador está nervioso, lo alejas del entreno, te duchas y mañana será otro día”.
La primera semana en lo que va de temporada donde se ha hablado más de cosas negativas que positivas ha terminado satisfactoriamente para los culés. De Messi no se volverá a decir que está fichado por el Madrid sin producir vergüenza a quien lo escribe.
El caso Eto’o parece bien administrado por todos. Toque de atencional jugador pero empatía para entender las circunstancias de éste. Solo Laporta ha apagado un incendió con gasolina. Veremos hacia donde sopla el viento.
No sabéis que bien sonaron las palabras de Messi!
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