Después de la euforia lógica de los últimos 4 días, en los que hemos llenado 2 veces canaletas, y a pesar de que en los próximos 7 días podemos ir otras dos, es el momento de calmarse, ducharse y , con la cabeza fría, pensar en que hay que mejorar si se quiere ser campeón en Roma.
Porque a pesar de todo, lo único cierto es que el Chelsea es el único equipo en lo que va de año que en 180 minutos no ha dejado que el Barça impusiese su estilo, siendo los londinenses el conjunto que menos tiros y oportunidades a concedido a los Pep Show Boys.
La razón principal la hemos de buscar en la calidad, inmensa, de los blues. Quizá sea el mejor equipo defensivo del mundo. Aunque han encajado muchos goles cuando han jugado abiertos, cuando se lo proponen pueden ser inexpugnables.
Con hombres en defensa como Alex o Terry, con centrocampistas tan expertos y veteranos como Ballack o Lampard hambrientos de gloria y llenos de esfuerzo, con bestias pardas como Essien y Drogba, con todos ellos pensando en defender es casi imposible ser brillante.
Pero hay mucho más de todo esto. Está que la libreta de Guardiola no funciono como lo hizo el día del 2 a 6(siempre que podamos colaremos este resultado…) y todo lo que probo en ambos partidos fue desacertado, no habiendo encontrado aún la fórmula.
Y es que con Messi entre líneas se pierde entre tanta torre se pierde cual turista pueblerino en New York. No encuentra con quien asociarse. Sí encima Henry no está en banda, el equipo pierde desborde, ya que Eto’o no será un extremo de irse en el uno contra uno.
También salió a la luz la carencia por alto del Barça. Cierto es que Alves solo centro una bien en toda la eliminatoria, la de Bojan, pero también lo es que en caso de ir bien dirigido, es muy difícil que alguien remate, ya que con Messi en punta y Eto’o y Henry en banda, llegar al remate es complicado.
Para hacerlo el balón tendría que moverse rápido, y no se ha hecho. Se ha tenido, se ha encerrado al rival, pero al llegar a tres cuartos de campo la luz se apagaba. Con los dedos de una mano se pueden contar los pases entre líneas, una de las armas de Pep.
La final será contra el United. Un equipo aparentemente sin tanto físico como el Chelsea, pero igual de rocoso y con más talento arriba, aunque es posible que mucho del que juegue se dedique a destruir más que a crear. Por fortuna tenemos espejo donde mirarnos.
Hace un año, llorábamos mientras veíamos como los Red Devils sacaban billete para Moscu. Sus actores son los mismos, los del Barça casi también. Solo cambiará el director del Barça. Pep tiene trabajo viendo esos dos partidos para saber que no hacer.
Así de entrada, se nos ocurre no ser tan previsible en el ataque, pero ser más “normal” en el posicionamiento del equipo. Abrir bien el campo y hacer trabajar de verdad a sus hombres de ataque en defensa. Y, por último, aprovechar bien las pocas ocasiones que, en principio, se producirán.
Tiempo queda para preparar la defensa. Ahora, después de la borrachera seamos conscientes que de un año a otro la interpretación de nuestros hombres ha sido bastante parecida. Hagamos que el 27 de mayo no se repita el mismo guión que el año pasado.
No sabéis cuantas veces nos hemos pellizcado!!!
The Digital Garden.
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