El panorama preelectoral se mueve a tal ritmo que lo que vale para un día deja de ser válido con el paso de las horas. Los movimientos son continuos y parece que poco a poco las posturas se van radicalizando y aclarando al mismo tiempo. En una semana dos bajas, que, al final, pueden ser más decisivas de lo que parecen.
Y no en el sentido que se cree, al contrario. Rosell tiene mucho detractor, e independientemente de quien este delante suyo, a la mínima que sea buen orador, que mantenga las bases del proyecto deportivo de Laporta y tengas unas formas diferentes, tendrá mucho margen de captación de votos.
Jaume Ferrer no está dentro de los buenos oradores. Su extremada timidez provoca que su discurso pase demasiado desapercibido, pero hay un dato revelador. No ha salido a la palestra después de tener el apoyo explicito de Laporta, hombre que le ha humillado públicamente en reiteradas ocasiones.
Nos consta que su relación con él no ha cambiado. Sigue distante con él, pero no quiere dar elementos perturbadores al entorno, que lo ve como el elemento que evitó la dimisión de Laporta, con su decisión de mantenerse en la Junta, cuando los Soriano y compañía dimitieron. Y eso parece que no se le perdona.
El es consciente de eso, y por este motivo ha decidido mantenerse fuera de fuego cruzado en el que se hubiese convertido cualquier declaración pública. Pero la situación real es que sigue negándose a incluir a los hombres que le diga Laporta y a Joan Oliver como Director General del club. No acepta ninguna propuesta de Laporta, ninguna imposición…Esto a día de hoy, que nunca se sabe por donde soplará el viento.
Fuera de la dicotomía sandrismo versus laportismo, entramos en las terceras vías. Los Guixa, Medina, Minguella y la sociedad civil están moviéndose, pero haciendo muy poquito ruido. El que más ruido hace es Benedito, con un modelo parecido a Ferrer, pero oponiéndose a la venta de patrimonio. En principio, algo que desconocemos si Rosell defiende o no, pero que le puede dar bastantes votos.
En un principio, parece que puede conseguir las firmas y de no aparecer nadie más, ser el que decida las elecciones, con los votos que le reste a uno de los dos candidatos. Pero siempre que no aparezca nadie más. Y…parece que la sociedad civil lo está buscando, aunque sin éxito.
No debe ser difícil si quienes se mueven por detrás tienen mucha relación con el caso del Palau de la Música, o son gente con la reputación de Minguella…ya se sabe, todo por el bien del Barça, y la clave del actual éxito, Messi y compañía…Sí, no hay intereses por el medio, es todo altruista.
Veremos como queda la cosa, pero Rosell parte con un cuerpo de ventaja. Ferrer en el cara a cara público pierde bastante, pero su adversario tampoco tiene mucha pegada. Si Benedito sabe mantenerse lejos del fuego y lanzar buenos golpes, podemos ver alguna sorpresa. No para ganar, pero si para quitarle votos a uno de los dos.
No sabéis que cerca están las elecciones!
The Digital Grande
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