El mes de abril ya está aquí y la fase final de la temporada de fútbol ya ha llegado. Con el barcelonismo en estado de shock por la prematura eliminación del equipo de baloncesto, todas las miradas estaban puestos en lo que decía Pep sobre la salida de pata de banco de Rosell.
Como casi siempre, Guardiola ha estado sublime, sensacional, antológico. Siempre se dice que es el Presidente real del club. Después del discurso largísimo que ha ofrecido cuando se le ha preguntado sobre la porra de Rosell ya no cabe dudas. El club no puede estar en mejores manos.
En esa respuesta ha hablado del respeto a los rivales, de lo difícil que es ganar, de la diferencia entre ridículo y competir, ha alabado a Pascual y a los suyos, para decir, al final, que él no hubiese dicho jamás ese resultado y que desde que lleva en el club, se trabaja para que desde la humildad y el trabajo se puedan conseguir las cosas. Impecable.
Se ha pasado Pep más de media rueda de prensa contestando cosas que no tenían nada que ver sobre el partido contra el Vilareal. Y es curioso. Pues es uno de los más complicados que le quedan al Barça. Lo jugará después del parón por el virus FIFA, con muchas bajas, teniendo en frente un rival durísimo.
Guardiola ha dejado claro que Messi está bien, sin lesión, pero ha explicado que el hecho de haber realizado un viaje tan largo, de haber pasado de jugar a 0 grados en New Cork, ha estar a más de 30 en Costa Rica supone un castigo elevado al cuerpo que hay que valorar como afecta al jugador.
A nosotros nos queda la sensación de que no jugará de salida Leo Messi, pero que si estará en el banquillo. Pero no es más de una sensación. Lo cierto es que Guardiola también tiene entre algodones a Pedro y a Bojan, que en el centro del campo no contará con Xavi y en defensa a las bajas seguras de Abidal y Puyol se le suma la dudosa presencia de Maxwell.
Con todo ello deberá enfrentarse a un conjunto que pasa por ser de los mejores de la Liga, que tradicionalmente le ocasiona muchísimos problemas al Barça y que en el Camp Nou exigió al Barça el máximo para sacar los 3 puntos. Será una prueba de cara al partido del Shaktar.
La velocidad arriba de los puntas amarillos, es similar a la que ofrecen los brasileños de los ucranianos. Hacer jugar a Milito después del trote que se ha dado esta semana puede ser peligroso para su salud. Pero sin Xavi, Busquets se antoja fundamental en la media para dar velocidad de balón. Veremos por que opción se decanta el técnico culé.
Mucha gente ve el partido como clave de cara a la Liga. De perderlo, dejaría al Madrid con la posibilidad de llegar al Bernabeu con la esperanza y sueño de que ganando el clásico quedasen por encima de los azulgrana. Pero no hay que olvidar que en ese supuesto, queda muchísima Liga, y muchísima Champions.
No sabéis lo que nos jugamos en el Madrigal!!!
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